La represión de activistas sociales en Argelia, en aumento

0
219

Ginebra, Suiza.- Una activista de derechos humanos argelina, impedida de salir de su país, cuestionó por videoconferencia a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre el clima de represión y opresión de las libertades fundamentales en Argelia, y sobre los abusos que sufren los activistas de Hirak.

Hablando en el contexto de la pre-sesión del examen periódico universal dedicada a la sociedad civil, la activista de derechos humanos argelina Jamila Loukil, quien fue prohibida, con su esposo, Kaddour Chouicha, vicepresidente de la oficina de la Liga Argelina para de Defensa de los Derechos Humanos (Laddh), que viajará a Ginebra para asistir a los trabajos de esta reunión, entregó un testimonio en el que denunció prácticas policiales represivas en Argelia, actos de intimidación, prácticas de hostigamiento judicial y el uso por parte de las autoridades de su país de prohibiciones arbitrarias de viajar para presionar a los activistas de derechos humanos.

Jamila Loukil relató cómo la policía la detuvo junto con su marido en el aeropuerto de Orán, que a sabiendas quería hacerle perder su viaje a Ginebra, precisando que «fue sólo después de la salida del ‘avión que pudimos salir’ de el Comisariado.

Encarcelada durante diecisiete meses por cargos falsos de terrorismo junto con su marido y el periodista Said Boudour, la Sra. Loukil denunció la situación de los derechos humanos y las libertades que se ha deteriorado drásticamente en Argelia con una represión sin precedentes de los derechos y libertades fundamentales.

En el ámbito de la libertad de reunión y manifestación, señaló que desde 2021 el código penal ha sufrido una amplia reforma con la ampliación de los campos de acusación, el endurecimiento de las sanciones penales y sobre todo la ampliación de la noción de terrorismo. a todas las actividades o cargos críticos, con la instrumentalización de la institución judicial.

“Esto ha llevado a la criminalización de las actividades de asociaciones, sindicatos, políticos, defensores de derechos humanos, periodistas y el encarcelamiento de miles de personas”, protestó.

Señaló, por otro lado, que no se han cumplido los compromisos de Argelia de respetar la libertad de prensa y la libertad de expresión, recordando que periodistas y blogueros han sido encarcelados por cargos de terrorismo o disposiciones del código penal que prevén penas privativas de libertad, como como incitación a reuniones no armadas, desprestigio de decisiones judiciales, ataque moral al ejército, injuria a funcionarios públicos y difamación.