Las delegaciones del Alto Consejo de Estado y del Parlamento de Tobruk anunciaron, el jueves en Bouznika, al término de sus reuniones en el marco del diálogo libio, que han llegado a un acuerdo global sobre los criterios y los mecanismos transparentes y objetivos para ocupar los puestos de soberanía.
Las dos partes acordaron también continuar este diálogo y reanudar estas reuniones durante la última semana de este mes para completar las medidas necesarias que garantizan la aplicación y la activación de este acuerdo, indica el comunicado final conjunto leído por Driss Omran de la Cámara de Representantes de Libia, en presencia del ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita.
Las dos partes en el diálogo llamaron a la ONU y a la comunidad internacional a apoyar los esfuerzos de Marruecos por reunir las condiciones adecuadas y crear un clima propicio para lograr una solución política global en Libia, reiterando su agradecimiento y gratitud al Reino y a Su Majestad el Rey Mohammed VI por el apoyo y la asistencia para superar la crisis libia y realizar las esperanzas del pueblo libio y sus aspiraciones de construir un Estado civil y democrático que goce de la paz, de la seguridad y de la estabilidad.
También afirmaron que sus reuniones, que se mantuvieron en «un ambiente amistoso y fraternal caracterizado por la comprensión y el consenso», se producen tras su conciencia de la situación actual del país, a diferentes niveles, una situación extremadamente peligrosa que amenaza la seguridad, la integridad territorial y la soberanía del Estado, derivada de las intervenciones extranjeras negativas que reavivan las guerras y los alineamientos regionales e ideológicos.
Las dos partes subrayaron igualmente que estas reuniones se celebran de conformidad con el artículo 15 del acuerdo político libio concluido en Sjirat y en confirmación de las conclusiones de la Conferencia de Berlín que apoyan la solución política y sobre la base de las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad, y se explican por su conciencia de las peligrosas repercusiones derivadas de la división política e institucional que ha hecho que el ciudadano pierda la confianza en el papel de las instituciones legislativas, ejecutivas y de control debido a las malas condiciones de vida a todos los niveles.