El gobierno de Estados Unidos permitirá a sus ciudadanos interponer demandas contra en contra de empresas que hagan uso de propiedades confiscadas después de la Revolución cubana en 1959. La medida se pondrá en vigor a partir del 2 de mayo próximo.
La medida está considerada en el Título III de la Ley Helms Burton, la cual fue activada por primera vez desde su instauración. México manifestó su decepción por esta reacción de Washington, ya que aplica también contra firma de este país que tienen negocios con la isla.
Ante ello, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) manifestó que iniciará gestiones para proteger a las empresas nacionales que «hacen o tienen interés en hacer negocios con Cuba y que pudieran ser afectadas», según un comunicado de la dependencia.
Asimismo, expresó que «rechaza la aplicación de leyes comerciales unilaterales con carácter extraterritorial, pues violan las normas del derecho internacional», al tiempo refrendó su apoyo al fin del bloqueo económico y comercial impuesto contra Cuba.
El gobierno cubano, a su vez, calificó señaló que esta acción es una violación flagrantemente al Derecho Internacional, al atacar directamente la soberanía y los intereses de terceros países.