Inicia Marruecos programas de desarrollo agrícola y forestal sustentables

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Su Majestad el Rey Mohammed VI, acompañado por SAR el Príncipe Heredero Moulay El Hassan, presidió, hoy jueves en la provincia de Chtouka Ait Baha, la ceremonia de lanzamiento de la nueva estrategia de desarrollo del sector agrícola denominada «Generación Green 2020-2030» y la relativa al desarrollo del sector de aguas y bosques llamada «Bosques de Marruecos».

Al comienzo de esta ceremonia, fue proyectada una película institucional que pone de relieve la dinámica de desarrollo que ha experimentado el sector agrícola en la última década, en particular gracias al Plan Marruecos Verde, con testimonios de agricultores que se han beneficiado del Plan.

Posteriormente, el ministro de Agricultura, Pesca Marítima, Desarrollo Rural y Aguas y Bosques, Aziz Akhannouch, presentó ante el Soberano las líneas maestras de las nuevas estrategias «Generación Green 2020-2030» y «Bosques de Marruecos».

Akhannouch indicó, en esta ocasión, que la nueva visión estratégica del sector agrícola ha sido elaborada de acuerdo con las Altas Orientaciones Reales contenidas en el discurso del Soberano con motivo de la apertura de la primera sesión del tercer año legislativo de la décima legislatura (12 de octubre de 2018).

Esta estrategia se basa en la capitalización de los logros del Plan Marruecos Verde, mediante la adopción de una nueva visión del sector agrícola, la consagración de una nueva gobernanza y la dotación del sector de medios modernos, añadió.

Akhannouch se centró en los logros alcanzados en el marco del Plan Marruecos Verde, lanzado por el Soberano en 2008, especialmente la firma de 19 contratos-programas, la aplicación de 12 planes agrícolas regionales, la creación de cuatro nuevas agencias, la entrada en vigor de 4.500 textos jurídicos y más de 34 mil millones de DH movilizados por financiaciones internacionales.

A nivel macroeconómico, el PMV ha permitido la multiplicación del PIB agrícola y de las exportaciones agrícolas, así como el aumento del volumen de las inversiones, prosiguió Akhannouch, señalando que a nivel social, el Plan ha permitido la creación de puestos de trabajo y el aumento de la tasa de cobertura de las necesidades alimentarias.

En cuanto a la sostenibilidad, el Plan ha fomentado el ahorro de agua de riego, la consolidación de la resistencia de la agricultura y el declive de la agricultura pluvial, además de impulsar una dinámica de integración de la pequeña y mediana agricultura, beneficiando a 2,7 millones de agricultores, enfatizó.

Akhannouch dijo que el sector agrícola marroquí tiene como objetivo alcanzar un nuevo nivel de desarrollo, destacando que la nueva estrategia agrícola se basa en dos grandes fundamentos, a saber, la valorización del elemento humano, conforme a las Altas Orientaciones Reales, mediante el surgimiento de una nueva generación de clase media agrícola (entre 350.000 y 400.000 familias), y el nacimiento de una nueva generación de jóvenes empresarios, a través de la movilización y la valorización de un millón de hectáreas de tierras colectivas y la creación de 350.000 puestos de trabajo para los jóvenes.

Esta clase media y estos jóvenes agricultores también podrán contar con una nueva generación de organizaciones agrícolas más innovadoras y beneficiarse de nuevas medidas de apoyo que les permitirán reforzar sus capacidades, aseguró el ministro.

Según Akhannouch, el segundo fundamento de esta nueva estrategia se refiere a la continuación de la dinámica de desarrollo del sector, favoreciendo el desarrollo humano y social. Para ello, la nueva visión prevé la consolidación de los sectores agrícolas, con el fin de duplicar las exportaciones (entre 50 y 60 mil millones de DH) y el PIB agrícola (entre 200 y 250 mil millones de DH) en 2030, la mejora de los procesos de distribución de los productos mediante la modernización de 12 mercados mayoristas y mercados tradicionales, explicó Akhannouch.

También se trata de fortalecer la resistencia y la sostenibilidad del desarrollo agrícola, así como de mejorar la calidad y la capacidad de innovación, subrayó Akhannouch, señalando que se prevé en este contexto la concesión de 120 autorizaciones para mataderos modernos y el fortalecimiento del control sanitario.

La aplicación de esta estrategia requerirá un aumento anual del presupuesto del sector de casi 2,5% a partir del año 2020, estimó. En relación con la nueva estrategia relativa al sector de aguas y bosques «Bosques de Marruecos «, el ministro puso de relieve la importancia de las zonas forestales, cuya superficie se estima en 9 millones de hectáreas, y su función ambiental, económica y social.

En este contexto, indicó que el bosque marroquí se encuentra en un estado deteriorado, debido en particular al deterioro de 17.000 hectáreas de tierras forestales cada año, la debilidad de la valorización de los bosques de alcornoques, la extracción excesiva de leña y la sobreexplotación de las zonas de pastoreo.

Para fortalecer la competitividad del sector y asegurar su modernización, se elaboró la nueva estrategia de aguas y bosques sobre la base de un modelo de gestión integrado, sostenible y generador de riqueza.

Esta nueva estrategia tiene como objetivo hacer de los bosques un espacio para el desarrollo, garantizar una gestión sostenible de los recursos forestales, adoptar un enfoque participativo que implique a los usuarios, fortalecer las capacidades de producción de los bosques y preservar la biodiversidad, afirmó el responsable.

El mismo añadió que esta estrategia busca, de aquí a 2030, la repoblación de 133.000 ha de bosques, la creación de 27.500 empleos directos adicionales, además de mejorar los ingresos de los sectores de producción y el ecoturismo para alcanzar un valor de mercado anual de 5 mil millones de dírhams.

Para ello, la nueva estrategia se basará en cuatro ejes principales, a saber, la creación de un nuevo modelo basado en un enfoque participativo que implique a la población en la gestión y el desarrollo de las zonas forestales en función de sus riquezas, la promoción y modernización de las profesiones forestales mediante la creación de viveros forestales modernos y la introducción de herramientas digitales en la gestión del sector y, por último, la reforma institucional del sector mediante la cualificación de los recursos humanos, la creación de un polo de formación e investigación y la creación de una Agencia de Aguas y Bosques y una Agencia de Conservación de la Naturaleza.

Esta estrategia también prevé el desarrollo y la mejora de los diez parques nacionales con miras a garantizar un desarrollo económico y social respetando plenamente el patrimonio natural, cultural y territorial.

Estas dos nuevas estrategias, agrícola y de aguas y bosques, serán aplicadas a partir de 2020, sobre todo a nivel territorial según las especificidades y los activos de cada región, en coordinación con todas las partes interesadas, según los principios de buena gobernanza en materia de seguimiento y evaluación de los inversores, así como de los indicadores de eficacia y rendimiento, recalcó Akhannouch, expresando el deseo de que se conviertan en una verdadera palanca para el desarrollo.

Seguidamente, el Soberano procedió al lanzamiento del proyecto de plantación de 100 ha de argán en la comuna de Imi Mqouren (1,8 millones de DH), proyecto que forma
parte del programa de plantación del argán agrícola en la provincia de Chtouka Ait Baha en una superficie de 1.250 ha.

Este programa, que concierne a 7 comunas y beneficia a 729 personas, requiere inversiones de aproximadamente 28 millones de dírhams. Forma parte de un programa global de desarrollo de la arganicultura en una superficie de 10.000 hectáreas en las regiones de Souss-Massa, Marrakech-Safi y Guelmim-Oued Noun.

Este programa global (2017-2022) moviliza un presupuesto de 490 millones de DH, financiado por el Fondo Verde para el Clima (390 MDH) y el Gobierno de Marruecos (100 MDH), y beneficia a las provincias de Essaouira (2.885 ha), Taroudant (1.337 ha), Sidi Ifni (627), Chtouka Ait Baha (1.250), Guelmim (623 ha), Tiznit (3.188 ha), así como la prefectura de Agadir Ida Outtanan (90 ha).

SM el Rey también procedió al lanzamiento de las obras de construcción de la red de riego a partir de la planta desalinizadora de agua de mar de Agadir, cuyas obras alcanzaron una tasa de avance del 65%.

La construcción de esta estación se ajusta a los objetivos del programa nacional de abastecimiento de agua potable y de riego 2020-2027, lanzado por el Soberano el pasado mes de enero y destinado a consolidar y diversificar las fuentes de abastecimiento de agua potable, acompañar la demanda de este inestimable recurso, garantizar la seguridad hídrica y luchar contra los efectos del cambio climático.

Con una superficie de 20 ha, esta estación, situada a 40 km al sur de Agadir al norte de la localidad de Douira, comuna de Inchaden, dentro del Parque Nacional de Souss Massa, aspira a satisfacer las necesidades de agua potable de Gran Agadir y de agua de riego de la llanura de Chtouka.

Este proyecto, fruto de una asociación público-privada, tiene como objetivos principales el suministro de agua potable a Gran Agadir, debido a la insuficiencia de la oferta de los recursos convencionales, y la salvaguardia de la capa freática (déficit anual de recursos subterráneos estimado en 90 millones de m3).

También tiene por objeto asegurar el abastecimiento de agua de riego de la llanura de Chtouka (15.000 hectáreas) y la preservación de las actividades agrícolas de la región, en particular los cultivos de alto valor añadido, así como aprovechar la experiencia del sector privado.

Con un coste total de 4,41 mil millones de dírhams (incluidos 2,35 mil millones para su componente de riego y 2,06 para su componente de agua potable), este proyecto, el primero de este tipo en África, consiste en la aplicación de los mejores procesos, en particular la tecnología de ósmosis inversa, y los equipamientos existentes en la actualidad en el ámbito de la desalinización del agua de mar y la distribución de agua.

Este proyecto consiste en la construcción de obras marítimas (dos tuberías de admisión de 1.100 ml de longitud cada una, equipadas con torres de admisión, una salida de descarga de 660 ml de longitud con difusor), una planta desalinizadora e infraestructura de riego (depósito de almacenamiento, 5 estaciones de bombeo, 22 km de aductora principal y 489 km de red de distribución).

La puesta en marcha de la planta desalinizadora, prevista para marzo de 2021, producirá inicialmente 275.000 m3/día a un caudal de 150.000 m3/día de agua potable y 125.000 m3/día de agua de riego. Sus instalaciones proporcionarán en su momento una capacidad total de 400.000 m3/día, que deberá repartirse a partes iguales entre la agricultura y el agua potable.

Cabe señalar que la Oficina Nacional de Electricidad y Agua Potable está realizando las instalaciones necesarias para el transporte de agua desalinizada al depósito del órgano autónomo multiservicios de Agadir «Ramsa», situado en la entrada de la ciudad de Agadir, con un coste de 363 millones de DH. A estas instalaciones se añaden las necesarias para el suministro de energía del proyecto de desalinización desde la estación fuente de Tiznit. El coste de la fuente de alimentación asciende a 92 millones de DH.

También en el marco del desarrollo del sector agrícola, la región de Souss-Massa conoce también la realización, en la provincia de Taroudante, del proyecto de modernización del perímetro irrigado de Aoulouz.

Este proyecto, que abarca una superficie de 4.486 ha, concierne a las colectividades territoriales de Aoulouz, Id Aoukemad y El Faed y beneficia a unas 6.000 explotaciones agrícolas que trabajan en el marco de una federación compuesta por 7 asociaciones de usuarios de aguas agrícolas.

Con un coste total de más de 470 millones de DH, este proyecto consiste en modernizar la red de riego tradicional de acequias en tierra que causa muchas pérdidas de agua, para convertirla en una red de riego localizada que sea generalmente eficiente en el uso del agua.

Así pues, tiene como objetivo valorizar el agua de riego, intensificar y mejorar la producción agrícola y aumentar los ingresos de los agricultores, con un aumento del valor añadido por hectárea de 4.000 a 28.000 DH.